Alfonso el Magnánimo

Alan Ryder reconstruye minuciosamente la trayectoria de Alfonso el Magnánimo desde su infancia transcurrida en el mundo caballeresco de Castilla, hasta su traslado a los reinos de la Corona de Aragón, recientemente atribuidos a su familia, y su posterior acceso al trono. Poderosos intereses dinásticos le impulsaron a intervenir en el turbulento mundo de la política castellana, pero Alfonso consiguió el margen de maniobra suficiente para perseguir sus propias ambiciones en un ámbito distinto, el del Mediterráneo central. Apoyándose en la antigua proyección mediterránea de la Corona aragonesa, Alfonso el Magnánimo conquistó Nápoles, impuso su voluntad al papado, desafió el poder de la república de Génova y se enfrentó al avance turco en los Balcanes.

A lo largo de estas páginas, el Magnánimo aparece como un hábil político que se desenvolvió con maestría en la jungla diplomática de la Italia renacentista, mostrándose como un príncipe agudamente consciente de la importancia del comercio y convirtiéndose en uno de los  principales mecenas del primer Renacimiento. Alfonso el Magnánimo dio vida al humanismo en el sur de Italia y convirtió su corte en una de las más brillantes de Europa. Su irradiación cultural dejó profundas huellas históricas.