Manuel Barea presenta 'Vertedero' con un debate sobre novela negra
“El género negro nos habla de las pasiones básicas, como las tragedias de Shakespeare”, ha dicho Vicente Garrido.
“La novela negra retrata la violencia que permea las vidas de las personas más desfavorecidas”, ha apuntado Manuel Barea.
Era una de los coloquios más esperados pues reunía, a la vez, la ocasión de escuchar al criminalista (y narrador) Vicente Garrido, al representante de Valencia Negra, Santiago Álvarez, y al joven ganador del primer certamen de novela negra convocado por la Diputación de Valencia: un andaluz de 25 años, Manuel Barea, que también se incorporó a la mesa de debatientes. Contaron con un público numeroso y entregado.
Organizaba el acto la Fira del Llibre, con la colaboración de Valencia Negra, y lo patrocinaba la Diputación de Valencia, en nombre de la cual intervino, brevemente, Vicente Ribes, quien puso el acento en la creciente popularidad de unos géneros que, en España, carecen de la tradición más que centenaria que tiene en otros países del área anglosajona.
Precisamente, Santiago Álvarez trató de trazar un cuadro sinóptico con las raíces y las derivaciones de un género que, según criterio extendido, crea Edgar Allan Poe, continúa Conan Doyle y acaba de madurar con el relato de enigma de Agatha Christie. Pero lo que había empezado como un género de exquisitos o dandis, como relato burgués, se enzarza con los conflictos de la calle, el sudor y la sangre. Es el hard boiled americano que reúne a los más conocidos y quizás más valiosos nombres del género (Chandler), con una rama secundaria pero fascinante más psicológica representada por Jim Thompson y Patricia Highsmith.
En España, García Pavón y su guardia Plinio es un auténtico precursor de la eclosión que no tarda en producirse y que alumbra una quinta de escritores notables: Juan Madrid, Vázquez Montalbán, González Ledesma, Andreu Martín.
La aparición de autores del género con matices estilísticos o características nacionales más o menos especificas extiende el género negro desde el círculo polar a Grecia: Márkaris (que estará en Valencia Negra), los escandinavos innumerables, Philip Kerr, Fred Vargas…
Como sus maestros, los nuevos autores retratan la sordidez de las zonas de sombra de los grupos de poder, político y económico, o de la misma condición humana ya que, apuntaría Garrido poco después, “al igual que las tragedias de Shakespeare, estos relatos nos hablan de las pasiones básicas: de la ira y de la envidia, de la venganza, de la lealtad o la traición. A veces de la redención posible”. Mientras se celebraba la mesa se difundía la noticia de que Rafael Chirbes ha obtenido por En la orilla, que no es novela negra pero habla de la corrupción, el Premio Nacional de la Crítica.
